La vida tras el deporte de competición: por qué nunca es demasiado pronto para empezar a planificar

Muy pocos deportistas profesionales o aficionados de alto nivel ganan lo suficiente como para tener resuelto el resto de su vida. Por ello, las entidades deportivas —organismos rectores, comités nacionales, ligas y clubes individuales— deben plantearse brindar un apoyo formal a la transición profesional que ayude a los deportistas a encontrar una salida profesional tras la vida deportiva.
11/11/2022
Mayi Cruz Blanco, responsable global de LHH Sports Solutions and Athlete Programmes

"Hay que decir que casos como los de Usain Bolt o Michael Phelps son una excepción en la competición olímpica", declara Chantal Buchser, directora de proyecto sénior de asistencia a deportistas del Comité Olímpico Internacional. "La trayectoria deportiva puede ser corta y los ingresos por el deporte muy reducidos. No están en consonancia con los años de dedicación y compromiso que los deportistas han entregado. Por eso nuestro programa es tan necesario para ayudar a los atletas a encontrar oportunidades profesionales después de la competición".

 

Sin duda, el COI ha sido pionero en el campo de la asistencia a la transición a la vida después de la competición. En los últimos 16 años, el COI ha trabajado estrechamente con The Adecco Group, uno de los mayores proveedores del mundo de asistencia a la transición profesional, para ayudar a más de 50.000 deportistas a planificar su trayectoria profesional tras la competición.

 

Actualmente, el COI ofrece el programa Athlete365 Career+, un completo plan de transición que incluye asistencia y recursos para ampliar las oportunidades de formación y empleo y así mejorar las perspectivas de los deportistas de tener una vida estable y satisfactoria después de la competición.

 

Buchser explica la importancia de animar a los deportistas a dedicar parte de su atención a planificar su vida posterior mientras aún están en activo. "La mayoría de los deportistas de élite comprenden que sus carreras pueden acabar por factores como las lesiones, y que deben dedicar un mínimo de tiempo a prepararse para la vida tras la competición", añade.

 

El problema es, como Buchser bien sabe de primera mano, que puede ser muy difícil hablar de planes de futuro con deportistas que están completamente centrados en su entrenamiento o recuperándose de una gran competición como los Juegos Olímpicos, cuando posiblemente estén sometidos a una intensa tensión psicológica.

 

Los estudios realizados entre deportistas que acaban de finalizar un gran acontecimiento o que afrontan el fin de su vida de competición señalan que muchos sufren crisis psicológicas de diversos grados. Algunos estudios concluyen que la retirada del deporte de élite afecta a los aspectos sociales y físicos de los deportistas, y que provocan cambios en sus funciones, relaciones y rutinas diarias. Las gimnastas de élite, por ejemplo, describen la sensación de dejar la competición como quedarse “atrapadas entre dos mundos”.

 

Esto puede ser un problema también para los deportistas profesionales, cuyas carreras son a menudo incluso más cortas que las de los deportistas aficionados de alto nivel.

 

Los datos actuales señalan que la duración media de la carrera profesional en las cuatro grandes ligas norteamericanas va desde poco más de cinco años en la National Hockey League y la Major League Baseball a algo menos de cinco años en la NBA, y a solo tres años en la NFL. En los niveles más altos del fútbol de competición ocurre lo mismo. En la Premier League inglesa, por ejemplo, la carrera media solo dura ocho años.

 

Estas carreras tan breves y el potencial de ingresos a menudo limitado hacen que planificar la vida tras la competición sea esencial para todos los deportistas, aunque sea difícil encontrar tiempo para abordarla.

 

"He estado en los Juegos Olímpicos y he intentado hablar con los deportistas sobre lo que quieren hacer con su vida después", dice Buchser. "No es el momento adecuado. Los deportistas pueden sufrir lo que se denomina "depresión poscompetición". Dedican tanto tiempo y energía a un único acontecimiento que, cuando este se acaba, puede producirse un fuerte deterioro del estado de ánimo. Por eso es tan importante hacerles llegar el mensaje de que pueden hacer más con su vida que ser deportistas".

 

Se está avanzando en algunos países, explica Buchser. Los comités olímpicos de Estados Unidos, Canadá, Australia, Noruega y Suiza, entre otros, han dado el paso de ayudar a sus deportistas a prepararse para la vida tras el deporte mientras aún están inmersos en la competición, nos dice.

 

También nos cuenta que muchos miembros del movimiento olímpico reconocen que debe hacerse más. Hace poco, el Presidente del COI, Thomas Bach, declaraba que los programas como Athlete365+ son esenciales para ayudar a los deportistas a conseguir la formación y las oportunidades de empleo que les permitan alcanzar "la excelencia dentro y fuera del terreno de juego durante toda su vida".